¿Acabas de llegar a España y quieres conocer cuáles son los requisitos para obtener un permiso de residencia y trabajo en España? A continuación, te acercamos las principales claves que has de conocer al respecto.
Permiso de residencia y trabajo en España: para qué sirve
Así pues, las personas extranjeras que busquen establecerse en España deberán tener, previamente, una autorización de residencia y/o trabajo en nuestro país. Es el requisito para encontrarse en una situación legal y así poder desarrollar la actividad laboral pertinente sin problemas.
Cómo obtener el permiso de residencia y trabajo en España y tipos
La legislación vigente estipula diferentes vías por las que las personas no nacionales pueden lograr un permiso para trabajar en España. No se tratan aquí los permisos de estudios, ni los de reagrupación familiar, pues en principio no permiten el trabajo por cuenta ajena o propia. Estas son las principales formas de obtención.
Permiso de residencia y trabajo en España por cuenta ajena
Una de las vías para obtener este permiso es contar con un trabajo por cuenta ajena. Es un tipo de permiso que se da a los extranjeros extracomunitarios que tienen una oferta de empleo, de mínimo un año y a jornada completa. Para poder obtener este tipo de permiso no se ha de ser ciudadano de ningún país miembro de la Unión Europea, no hay que estar en situación irregular, carecer de antecedentes penales, no tener la entrada prohibida en España y presentar el contrato de trabajo firmado por empleador y empleado.
Residencia para hacer prácticas profesionales
Otro tipo de permiso de residencia y trabajo en España es el vinculado a la realización de prácticas profesionales. Mediante este tipo de norma es posible contratar a trabajadores que cuenten con una titulación y que haya finalizado sus estudios en los dos últimos años. Esto puede hacerse en la Oficina de Extranjería. Es un permiso que es válido durante un tiempo de máximo dos años.
Permiso de residencia como profesional altamente cualificado
La tercera de las opciones es solicitar un permiso para trabajar en España a través de la petición de la Autorización de Residencia como Profesional Altamente Cualificado. Está destinado para trabajadores que cuentan con una alta cualificación y formación o dilatada experiencia. Para ello, han de contar con una oferta de empleo que esté, al menos, sobre los 40.000 euros anuales. Esta autorización se pide a través de la Unidad de Grandes Empresas.
Permiso de residencia y trabajo por cuenta propia
Puede solicitar permiso de trabajo por cuenta propia el extranjero que sea mayor de 18 años con la finalidad de ejercer una actividad empresarial o profesional por cuenta propia. La autorización inicial tendrá una duración de un año y se limitará a una Comunidad Autónoma y a un sector de actividad.
Para ello es preciso que el solicitante no se encuentre irregularmente en territorio español. No tener antecedentes penales, ni en España ni en su país de residencia durante los últimos cinco años. Y abonar la tasa de autorización de residencia temporal.
En cuanto al proyecto empresarial, deberá cumplir con los mismos requisitos que la legislación vigente exige a los españoles para el funcionamiento de la actividad, tener la cualificación profesional que exija la ley, o en los demás casos, experiencia profesional, así como la colegiación profesional en los casos en que sea obligatoria. También hay que acreditar que la inversión prevista será suficiente y la incidencia que tendría en la creación de empleo. Así como contar con recursos suficientes para su propio sostenimiento. En este caso las cuantías a acreditar son las previstas para la autorización de residencia temporal por reagrupación familiar.
Tarjeta comunitaria
La quinta opción es la de la tarjeta comunitaria. Es un tipo de tarjeta que se da a familiares de ciudadanos españoles o comunitarios. Es una tarjeta que posibilita trabajar tanto por cuenta ajena como por cuenta propia sin tener que hacer más trámites.
Contar con un permiso de residencia de larga duración
La última de las vías es ser el titular de un permiso de residencia de larga duración en España o de la UE. De este modo, se podrá tanto trabajar como vivir sin problema alguno.